El puente de les Peixateries Velles (viejas pescaderías) o puente de les Palanques Vermelles (palancas rojas) ubicado sobre el río Onyar se ha convertido en uno de los espacios para conocer durante una visita a Girona, por ofrecer hermosas vistas panorámicas de la ciudad, así como por ser parte del Patrimonio Arquitectónico de Cataluña.
Uno de los atractivos del puente de hierro de Girona es que es una obra que fue desarrollada por la empresa de Alexandre-Gustave Eiffel, un ingeniero que ganó fama mundial por ser el creador de la torre de París construida en 1889 y que se convirtió en el principal símbolo de la ciudad luz.
Este puente de uso peatonal es muy llamativo, ya que su estructura metálica está pintada en un color rojo intenso, lo que lo hace muy llamativo, por lo que se le ha denominado como el puente de palancas rojas, aunque también se le denomina como puente de Eiffel.
Se eleva a unos 7 metros de altura con respecto al cauce del río Onyar, su estructura de hierro está compuesta por piezas con forma de «L», el pavimento está formado con tablones de madera y tiene una anchura de cerca de 2,60 metros, lo que lo hace muy cómodo para el tránsito peatonal.
El puente de hierro de Girona data del año 1877, fue diseñado por Manuel Almeda y su costo fue de 22.500 pesetas, la empresa Gustavo Eiffel de París, responsable de la obra, se encargó además de la construcción de otros puentes para Renfe, la principal operadora ferroviaria del país.
En 1979 se acometieron las obras de restauración del puente de hierro de Girona, debido a que presentaba deterioros en su estructuras a causa de la instalación de un pavimento de asfalto realizada en 1959. Los trabajos consistieron en reforzar la estructura afectada por la humedad y sustituir el pavimento por tablones de roble.
Puede visitar el puente de hierro de Girona y hacer noche en el Hotel Palau, donde podrá descansar placenteramente tras su paseo por la ciudad.